El flamenco es un arte y pertenece a los artistas. Lo demás, es un exudado de su propia condición.

miércoles, 31 de julio de 2013

BOHÓRQUEZ SE EQUIVOCA

No nació este blog para la crítica del flamenco ni ninguna de sus actividades, tanto artísticas, como de opinión, prensa o e enseñanza. He narrado alguno de los espectáculos a los que he acudido explicando –a mi manera- lo que he visto. No sé si estoy capacitado para ello. Después de diez o doce horas tras la barra de mi bar, me sirve de desahogo. Como los poemas que escribo.
Estas líneas son producto de mi asombro, en principio, y de mi incredulidad, en segundo lugar, tras haber leído en ocho días tres columnas de Manuel Bohórquez –critico de flamenco del Correo de Andalucía- en los que ataca duramente el libro de Ángel Vela “Triana, la otra orilla del flamenco”, cuya presentación fue anunciada en este blog hace un par de semanas. El corto espacio de tiempo y la reiteración sobre el tema me llevó a sospechar un posible plan para aumentar la venta del libro -de hecho yo ya tengo dos amigos que quieren que se lo mande-, pero cuando deseché la idea, porque creo que ambos personajes son absolutamente honrados, aprecié un ensañamiento por parte de Manuel que todavía no me explico. Vamos al turrón.

La crítica.
Toda actividad humana es susceptible de ser criticada debido a que los seres humanos no somos perfectos, y por lo tanto, nuestra obra tampoco. Esa crítica puede ayudar a aquel a quien se hace, siempre que esté fundamentada y se haga dentro de unas formas correctas y cordiales. Cuando se apartan de la razón o pierden esas maneras, dejan de ser críticas y se convierten en agravios personales.
            La crítica es, también, una forma de comunicación entre personas, y por lo tanto, en ella debe prevalecer la educación y el respeto por el criticado. Cuando Bohórquez utiliza palabras como “no hay por donde cogerlo”, está faltando a esas normas y convirtiendo su escrito en un libelo cruel.

La investigación y el flamenco.
            En el comienzo del libro de Stephen Hawking “Historia del tiempo”, en los agradecimientos, dice el autor: <<Alguien me dijo que cada ecuación que incluyera en el libro reduciría las ventas a la mitad. Por consiguiente, decidí no poner ninguna en absoluto>>
Ignoro si es posible acometer la escritura de un libro sobre flamenco sin aportar ninguna fecha o lugares de referencia, me parece imposible; pero aburren. A mí me aburren. Los soslayo y paso a otra cosa. En libros de Bohórquez he leído auténtica literatura sobre la vida de Tomás, El Canario, Gerena, etc.… y muy buena por cierto, salida de su pluma. En qué año nació tal o cual cantaor, me da lo mismo. Si me habla de su estilo, atiendo más. Si me explica si era un buen ligaor, o largo, o cita su escuela, me ilustro. Si incluye un Cd explicativo, aprendo.
            El modelo matemático que propone Manuel en estos últimos artículos no me complace. En uno de ellos llega a decir: “Con Frasco el Colorao, que era el primer misterio que había que resolver…” Esto es lo más grande del mundo. Le está diciendo a un tío lo que tiene que escribir en su libro…

El dogma del rigor histórico de los datos
Conozco poco a Bohórquez y no he convivido con él lo bastante –prácticamente cero-, como para hacer un análisis exhaustivo de su personalidad. Le leo, sí, desde mi juventud, en el correo, como critico de flamenco y hasta ahora, nunca me había dado muestras de esa intolerancia cuyo penacho ha ostentado estos últimos días.
Le he jaleado en su blog y me he identificado con él  a menudo a través de su pasión por Tomás Pavón y su escasa –ya quisiéramos los flamencos disponer de más cositas del genio- obra, pero eso no significa que tenga, como han hecho algunos de sus seguidores, decir que no voy a comprar el libro sólo porque él ha dicho que es malo; todo un pontífice. Supongo que de ahora en adelante el que escriba un libro de flamenco deberá contar con el “nihil obstat” de Bohórquez, o enunciar en el prefacio el juramento de “derramar hasta la última gota de sangre si ello fuera necesario en el afán por hacer resplandecer la veracidad de los datos que en la obra se aportan”. Demasiado para el cuerpo.

La luz del entendimiento
            Sigo sin entender el porqué de estos artículos, pero creo que, si de verdad han sido alguna vez amigos, como yo tenía entendido, Manuel y Ángel deberían hablar. Nada más; de ahí puede salir alguna luz. Y digo que no lo entiendo porque, además, y de golpe, Bohórquez se ha enemistado con mucha gente que antes admiraba su obra y opiniones y me temo que, a  partir de ahora, en cualquier dato que aporte, va a tener que cerciorarse muy mucho de la veracidad, autenticidad y carta de naturaleza del mismo, ya que va a tener muchas escopetas cargadas esperando el patinazo. Yo no tengo escopeta; como digo, los datos los leo pero no los considero. En mi opinión, vale más una patá del Carpeta que cien artículos de investigación flamenca.

            Si damos por bueno lo que dice Manuel sobre que Ángel ha aportado poco o nada a la historia del flamenco, él, con destruir, ha aportado menos. Saludos para todos.

domingo, 28 de julio de 2013

ZURRAQUE


Vino ayer a buscarme una letrilla
y el deje de su estilo solearero,
el más fiel, más dulce y alfarero
flamenco modelado sobre arcilla.
Templo de la luz más cierta, joyero
que más que patrocinio de esta cilla
es apócrifa marca de esta orilla
y trocha del empeño rociero.
No sé por dónde ni por dónde no
o si antes o después vendrá su lira
de nuevo a verme, pero digo yo
que se impondrá su voz a la mentira
que niega al arrabal donde nació
la patria del jardín donde respira.

José Luis Tirado Fernández

martes, 16 de julio de 2013

NUEVO LIBRO DE ÁNGEL VELA: TRIANA, LA OTRA ORILLA DEL FLAMENCO

Ángel Vela presenta el miércoles dia 17 un interesantísimo libro, como todos los que publica, pero que en esta ocasión tiene al flamenco como referente. Y a Triana como telón de fondo; una combinación que a los que amamos esto y lo otro, nos puede hacer felices en su lectura. Será en el hotel Zenit, en Pagés del Corro 90, a las 21.00 horas. Yo voy.


domingo, 14 de julio de 2013

LAS MANOS DE MATILDE CORAL


¿Quién luce sus jechuras con ese garbo
y cobija el flamenco bajo su palio,
quién le roba a la lluvia las nubes blancas
y las cose en el vuelo de sus enaguas,
quién desmiente el vacío, quién con las manos
atrapa las estrellas del Altozano?


¡Cómo se abren tus manos!
parecen claveles grana
que lloran si rompe el aire
la siguiriya gitana:

<<Que yo no viera
 la luz del día
si mis ojos cubrieran
esas manitas.>>

Puntalitos son tus dedos
porque sostienen la llave
con la que abres promesas,
 enseñando lo que sabes,
 y finos broches de oro
con los que cierras el baile.
Cuando Triana resuena
con sus acordes triunfales,
te duele como un cuchillo
la soleá del Zurraque:

<<La corona de Triana
tiene su quinto puntal
la elegancia en esos pasos
que da Matilde Coral.>>

Prendida en los dedos lleva
la plenitud de la gloria
y al giro de sus muñecas
las penas se vuelven rosas,
se revelan los misterios:
no son manos, son palomas,
leves suspiros que ciñen
los firmamentos que adornan.

¡Qué colocación de brazos,
qué planta más portentosa!
¿Quién te ha prestado, flamenco,
abnegación más hermosa,
quién más largueza en su temple,
quién huella más primorosa?
Como fue, ¿quién hace el tango?,
soleá, ¿quién te da forma?,
 ¿quién te marca?, bulería,
siguiriya, ¿quién te adorna?,
¿quién te maneja, farruca?,
sevillana, ¿quién te borda?,
¿porqué a las luces del alba
pinta siluetas pasmosas
y a los cantes de la fragua
envolturas tortuosas,
porqué gritan los jazmines
 cuando Matilde los toca?
¡Qué difíciles los versos
que van germinando ahora
y cuánto tiempo anduvieron
esperando en la memoria!




La Paulova en la danza, fiel consejera,
Terpsícore su musa, la inspiradora;
el flamenco es Triana y en su solera,
siempre tuvo en Matilde su bailaora.


José Luis Tirado Fernández


domingo, 7 de julio de 2013

LOS TANGOS DE TRIANA, EL TITI Y EL ARTE DE PELAY CORREA (y III)


1.-Los tangos del Titi, un legado familiar.

            Me lo dijo El Moli, en una conversación relajada y amable: “Esos cantes son anteriores a mi abuelo Joaquin, se cantan en mi familia desde hace muchos años”.
            A diferencia de los tangos del Piyayo, personales y que utilizan también tonos menores, aunque realmente se tratan de una recreación de las guajiras en cuya base se inspiran, los tangos del Titi tienen un poco más de calado. Durante mucho tiempo pensé que eran de autoría personal e, incluso para alguna consulta que hice los resultados fueron idénticos: esos tangos eran de Joaquin. Pero la afirmación de El Moli tenía su fundamento, no sólo por hacerlo desde dentro del meollo, sino porque a través de un recorrido por sus distintos fragmentos aparecen indicios de una obra común.  Como uno de los tangos puramente corraleros, cargados de gracia y compás, se ha ido transmitiendo a través de distintas generaciones, aunque por la diversidad de sus estrofas, de tan variada gama melódica y que acumula tal cantidad de letras, debe, necesariamente, de haberse ido transformando y evolucionando. Una de ellas, la de “Por debajo de aquel balcón…”, puede tener su ascendencia en el carnaval gaditano, según esta página:


y no parece tan descabellada la teoría, porque la letra es la misma, aunque desconozcamos la toná de la copla carnavalera y además porque algún cante puramente trianero, como las chuflillas, sí tienen su origen en el carnaval. Pero de algo estoy seguro y es de que en Triana fue refinada como todo lo que toca esta tierra. Así lo afirma el viejo cantaor granadino Evaristo Heredia Maya: «En Triana siempre se ha cantao muy serio. Los cantes de los Puertos subían a Triana embrutecíos, y en Triana se hacían más asequibles, en esos patios de vecinos donde se cantaba que quitaba er sentío...».

2.- Apogeo de los tangos del Titi.

            En 1975 Camarón de la Isla graba, incluyéndolo dentro de su disco “Arte y majestad”, NO NAQUERES MÁS DE MI (Tangos del Titi), tal y como aparece en los títulos de crédito. Se trata de una serie de letras de Antonio Sánchez Pecino, el padre de Paco de Lucia, que es el guitarrista en este caso, adobadas para que se luzcan José y su propio hijo. Fue el diseñador de la carrera de ambos. Son cuatro estrofas al estilo de “Tú los quitas y yo los pongo”, seguidas e iguales de tono, muy bien servidas de guitarra y palmas. La última estrofa la hace según los tangos de Pastora “Que te calles, que te calles…”, malogrando el intento. Pero lo importante fue su trascendencia.




            El momento y el interés que en aquel tiempo suscitaba el de San Fernando a nivel nacional y de ventas, y con Manuel en vida,  hicieron que estos tangos se popularizaran, aunque con anterioridad ya se habían cantado y propagado, evidentemente por cantaores trianeros, como por ejemplo Naranjito, que en este video, acompañado por Paco Cepero, nos deja una estrofa genial:

Qué te vi a queré
le das tu comía  a un probe
tú te quedas sin comé.

            Estos sí serian los tangos del Titi con muy pocos añadidos, si acaso algún adorno característico de José.



                      Prácticamente los mismos, pero un poco más personalizados, los hace Paco Taranto en este video, a partir del minuto 5.50:


         Y entre los despropósitos más señalados, el de Poveda, curiosamente número uno del flamenco y de lo que él se proponga, y también lo que más gente consume y más escucha. Además hay batiburrillos de casi todos los cantaores donde mezclan la jambre con las ganas de comé, y primeras figuras que lo siguen usando sin citar el nombre del Titi y mucho menos el de Triana. Con su pan se lo coman.
               Esta es una de las versiones con más talento, la de Esperanza Fernández, aunque se haya acomodado la letra a su manera. La letra original la canta el Moli en el video de la entrada anterior. No obstante, y a pesar de haber ralentizado un poco el compás, a mi entender, es lo mejor que se ha edificado sobre la base de estos tangos del Titi.





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Foto de mi familia: Manuel el Titi


José Luis Tirado Fernández